VERUKA MCQUINN
- Nombre: Veruka McQuinn
- Edad: 21 años
- Progenitor divino: Perséfone
- Campamento original: Campamento Mestizo
- Historia: Nació en Seattle, ciudad donde vivía su padre mortal. Perséfone durante su estancia en el mundo de los humanos conoció a un joven de cabello azabache, ojos negros, cuerpo atlético y con un aire misterioso que le hacía irresistible. Ella no dejaba de pensar en él, pero su realidad con Hades la hacía caer de esa nube de amor y deseo.
Un día, armada de valor se acercó al joven, y el amor surgió entre ellos. Perséfone y aquel chico se veían cada día, el amor yacía en la pareja, pero la hora de marcha de Perséfone al Inframundo con su marido se acercaba. Ella no quería marcharse, a él le contó que marcharía seis meses, y le contó la razón por la que marcha.
Él la amaba tanto que no le importaba, él quería verla y no perderla nunca, estaba enamorado.
La pareja consumó su amor noches antes de la marcha de Perséfone.
Estando en el Inframundo se dio cuenta de que estaba embarazada, y obviamente Hades con el tiempo se dio cuenta del acto de adulterio de su esposa.
Como castigo la condenó a dar a luz con dolor como un humano mortal. Pero el trato que hizo Hades con la madre de ésta no tocará su fin. Y nació la pequeña Veruka.
La niña se crió con su padre, con la visita de su madre en primavera y verano.
Pese a esa carencia de la madre tuvo una infancia feliz, la familia de su padre la dieron la atención y el cariño necesario. La encantaba leer, su libro favorito era Alicia en el país de las Maravillas, siempre le llevaba consigo.
Con seis años de edad se interesó por la música, al volver de la escuela pasaba por un conservatorio y siempre se quedaba un minuto escuchando atenta la música que salía hacia fuera, hasta que un día le dijo a su padre que quería tocar algún instrumento.
Su padre asombrado la llevó y un instrumento grande y majestuoso captó su atención. Bellas melodías salían de su interior y su corazón la dijo que ese era el instrumento que quería tocar.
- Quiero eso, papá.- Dijo la niña a su padre.
Descubrió su nombre: Piano. Sonaba en sus oídos el nombre hasta mágico.
Días más tarde comenzó sus clases de piano, al principio la costaba pero con la práctica mejoraría exponencialmente.
Años más tarde, estando en el Instituto se convirtió en una joven de apariencia misteriosa, de aspecto extravagante, siempre pensando en fantasías y encerrada en su mundo. Era la imagen de su padre en su adolescencia. Hizo un grupo de amigos que hacian rituales para cumplir todos sus deseos, eran misteriosos y ella se sentía identificada con ellos. Además, era una gran pianista, pero sus estudios los tenía un poco desatendidos, cosa que preocupaba a sus padres. Perséfone se sentía mala madre al no poder ayudarla en los estudios, ya que ella iba casi cuando finalizaba ésta las clases.
La única asignatura que la gustaba en el Instituto era arte, dibujaba sin parar, parecía que en sus manos tenía un don, para el dibujo y para la música, su adorado piano y ella eran inseparables.
La joven, cada vez más descontrolada, Perséfone decidió contarle de quién era hija, la razón de por la cual no está seis meses del año.
Cuándo se lo contó, Veruka no daba crédito, esto causó que madre e hija se unieran más.
Terminó sus estudios y ahora estudia Bellas Artes en la Universidad.
- Personalidad: Dejó de ser la niña tierna que era hace años, ahora es igual que su padre: Misteriosa y fantaseosa. Su apariencia extravagante atraía a la par de repeler. Vivía por así decirlo en su País de las Maravillas, como si viviese en su libro favorito.
A los hombres eso les atrae, pero ella quiere encontrar esa persona que la quiera tanto como su padre amaba a su madre.
Su corazón era puro, amaba a su familia con toda su alma. Respecto a las relaciones personales se mostraba sociable, pero no se abría del todo a los demás hasta que no conocía a la gente.
La música era lo único que la hacía sentirse plenamente ella misma, su piano era su mejor amigo. Ha estado junto a ella gran parte de su infancia y tanto él como ella ham crecido, lo mismo su habilidad musical.
Se centró tanto en la música y en su piano que los estudios los dejó algo olvidados, cosa que a sus padres les preocupaba mucho.
A parte de tocar el piano dibijaba, tenía un cuaderno lleno de dibujos y bocetos creados por ella. Su “don” en las manos se hacía notar.
Desde que se enteró de quién era su madre se prometió a si misma y a sus padres que sería buena estudiante de nuevo, para que su padre y sobretodo su madre se sientan orgullosos de ella, debido a que tenía mucho descontrol, sobretodo en sus estudios.
Actualmente conserva su aura misteriosa, pero la joven descontrolada va desapareciendo, por lo menos en mentalidad.
- Defecto Fatídico: Desconfianza. Siempre cuando conoce a una persona nueva se muestra muy lejana, ya que teme que no sea una persona buena para ella. Por eso la distancia y la desconfianza, esa coraza que se coloca hasta que conoce bien a alguien. Pero es cuestión de tiempo.
- FC: Melanie Martínez
